Se entregaron vidrios armados para que los chicos puedan tener luz natural en los sectores que hasta ahora faltaban. También se donaron juguetes.
El Rotary Club de Mar del Plata cumplió durante la semana pasada con la primera etapa de la donación comprometida con el Hogar Divino Rostro.
Con la presencia del presidente de la institución, Oscar de Luca, acompañado de algunos miembros de su comisión directiva y dos integrantes del grupo de danza Ojos del Sur, se concretó el primer tramo de la donación de vidrios armados para que los niños que se alojan en el hogar tengan luz natural en sectores en los que hasta este momento faltaba. A su vez, se entregaron juguetes para que los chicos puedan disfrutar.
La hermana Juanita recibió la donación y los rotarios, junto con las representantes del grupo de danza, se sintieron conmovidos ya que los destinatarios de este aporte son niños y niñas que solo reciben cariño y contención social a través de la obra de esta entidad.
De esta forma, Rotary Club de Mar del Plata, que ya lleva más de 80 años trabajando ininterrumpidamente en la ciudad, cumplió una vez más con uno de sus objetivos.
Esta acción se suma a la donación del aula blanda para la Escuela 512, a la que asisten niños con problemas neurológicos.
Entre otros proyectos que se encararán en el presente período también se encuentran la restauración del monolito que da la bienvenida a quienes ingresan a la ciudad por la Autovía 2 y la probable construcción de baños públicos, que estarán distribuidos a lo largo de la costa y en otros puntos estratégicos de la ciudad.
“Como siempre, los proyectos de Rotary no son de concreción inmediata, pero rara vez quedan en el olvido y son atendidos en la medida de su factibilidad”, destacaron
los directivos y resaltaron “la predisposición de las autoridades municipales que siempre deben dar su aval para la concreción de proyectos que afectan el espacio público”,